top of page

Izamal - Encuentro con las historias

Enequel:

Leyendas retomadas por el izamaleño Don Ramiro Briceño López y cada leyenda está acompañada por un dibujo relacionado con el texto, dichos dibujos fueron realizados por uno de los hijos de Don Ramiro, el Profesor. José Miguel Briceño Amaro.

Hace muchos años, tantos que no se lleva la cuenta, llegó a este lugar donde se asienta la actual Izamal, un grupo de personas que se autonombraban Itzáes. Venían del oriente, navegando, luego caminando y parando en este lugar. Los guiaba un sacerdote lleno de bondad y sabiduría a quien llamaban Zamná.


Se sentó en una piedra y se puso a reflexionar sobre los hechos de los últimos días.


Recordaba la noche que, contemplando las estrellas en el templo máximo del reino de Mú, estaba tan ensimismado en ello, que no se percató de que alguien se le acercaba, hasta que fue llamado. Se trataba de Atinea, la reina del continente Atlante, quien le dijo:

"Zamná, tú eres de entre los sacerdotes de mi reino, el más sabio, el más bondadoso; pero también eres el más tenaz en conseguir lo que te propones, por eso te he escogido para encomendarte una misión de mayor importancia y mi deseo es que triunfes en ella.


Los augures y astrónomos más sabios de mi reino me han dicho que toda nuestra tierra será destruida y desaparecerá en la próxima luna, aún cuando no dicen como sucederá eso. He decidido que tú, mi mejor sacerdote, escojas a un grupo de familias de mi reino, y con ellos llevarás tres de los chilanes más sabios para que escriban lo que sucederá de hoy en adelante. Cuando tú llegues al lugar que te voy a decir, fundarás en él una ciudad y debajo de su templo máximo guardarás los escritos futuros y los que vas a llevar de aquí, donde se cuenta la historia del país Atlante."


Así lo hizo Zamná y a los días de navegación, habiendo visto el horizonte en dirección de la tierra que dejara, que dejara, una tormenta imponente con muchos rayos y el mar encrespado de tal forma, que se hundieron dos de las canoas que traía, pensó que ése era el fin de su país como su Reina le dijera.


De vegetales, solo veía en abundancia una planta que parecía estar armada con lanzas y con espinos muy duros, recomendando a su gente que no se acercara a ella.

Observando el cielo, vio que este se oscurecía y no tardó en precipitarse una lluvia torrencial. Locos de alegría los peregrinos se pusieron a bailar, festejando el agua que del cielo les llegaba.


Zamná se levantó de la piedra donde descansaba y salió en busca de algo que le sirviera para juntar el agua que caía, sin darse cuenta se aproximó a una de aquellas plantas, sintiendo en el muslo una aguda punzada que comenzó a sangrar abundantemente. Sus compañeros dándose cuenta de lo que sucedía y buscando una forma de castigar a aquella planta que había herido a su jefe, cortaron las hojas y con furia comenzaron a azotarla en las lajas que ahí abundan.

Zamná observaba lo que hacían estos; de pronto se levantó y tomando una hoja de aquellas que ya había sido azotada observó que salían de la misma unas fibras de gran resistencia. Entonces comprendió que su herida no había sido más que un aviso para que se fijara en aquella planta que tan útil sería para todos. Deteniendo el castigo, bendijo a sus Dioses por este descubrimiento.


Como la lluvia no cesaba, observó que el agua parecía atraída hacia el lugar, pues se deslizaba con velocidad y siguiéndola encontró, a poco de caminar, una oquedad a donde se precipitaba.

Ahí estaba el agua y el lugar que su Reina le había señalado: "Aquí debía fundar su ciudad y así se lo hizo saber a sus seguidores."

De esta manera se fundó la gran Izamal, en una fecha que se pierde en la noche de los tiempos, juntando dos fuerzas que son decisivas para nuestra tierra yucateca: la fuerza de los cielos, que es el agua y la fuerza de los hombres, que es el henequén.

https://izamalpueblomagico.wordpress.com

Featured Posts
Recent Posts
Archive
Search By Tags
Follow Us
  • Wix Facebook page
  • Pinterest App Icon
  • Twitter App Icon
  • Vimeo App Icon
  • YouTube Classic
  • Wix Google+ page
bottom of page